Sísmico... (Prólogo chino 2013).

Sísmico.

Siempre buscando.

Aburrido y sin sentido.

Desde muy, muy, muy temprano.

Siempre buscando y rebuscando.

No siempre encontrando.

Y hasta altas horas pensando.

Mancias y adivinación, filosofías de por medio.

Años caminando.

Años predicando.

Y otros tantos peleando.

Sin más Biblia que lo intensamente vivido.

Vivido en pocos años de ese “siempre buscando”.

Sísmico.

Tarot de por medio.

Cartas rodando.

Ángeles volando.

Sísmico.

Las letras de los demás fueron mi guía.

No solos de libros vive el hombre.

Sino también de sus firmas.

Otros Seres acompañando.

Y un camino trazando.

Lenta, muy lentamente.

Piedras que hablan, mitologías ciertas.

Diosas vivas, Diosas muertas.

Poca, muy poca Astrología.

Sísmico. Más sísmico que antes.

Chinos.

Libro de Cambios, con animales y abanicos.

Pañuelos y recuerdos.

Monedas al aire, mensajes al caer.

Una nueva visión por comprender.

Sísmico.

Ya no como antes.

Los Astros reemplazaron los Milagros.

Pero ellos siguieron estando.

Tan sísmicos como siempre.

Revelando el nuevo sismo.

Las personas pasaron a ser animales.

No había magia, solo sabiduría.

Acto chamánico sísmico.

Acto chamánico que ningún Chaman supo ver.

Fue en el olvidado y devastador Conejo de Metal.

Donde el Chancho de Agua se empezaba a despedir.

Se despidió antes de empezar.

Se despidió por dos.

Aún recuerdo ese sismo.

Sismo del que hoy me hago eco.

Eco que comparto desde la sísmica china.

Ya no somos iguales.

Ya no soy el mismo.

Sísmico.

Sigo.

Hoy me acompañan Cabras de Fuego.

Dragones ardientes.

 Y Serpientes rastreras.

Sísmicas.

Hoy me acompañan en sus formas chinas.

Hoy me acompañan en sus formas argentinas.

De acá.

Más sísmicos que yo.

Acá desde la mismísima Cruz del Sur.

Sísmica.

Yo hoy no tan sísmico.

Se lo que no quiero.

Se a donde quiero ir.

Se con quien quiero ir.

Jamás olvidando mi único anhelo.

Aparte de la Libertad.

El de generar yo otro sismo.

Extraído de "Horóscopo Chino 2013".